Noticias

Los jugadores presentan una demanda para detener la adquisición de Microsoft de Activision-Blizzard por problemas de monopolio

Los jugadores presentan una demanda para detener la adquisición de Microsoft de Activision-Blizzard por problemas de monopolio

La compra multimillonaria de Activision-Blizzard por parte de Microsoft se ha enfrentado a otro severo desafío legal, pero esta vez no proviene de la Comisión Federal de Comercio; proviene de un grupo de 10 jugadores autoproclamados que presentaron una demanda federal antimonopolio contra Microsoft por la preocupación de que la fusión crearía un monopolio de juegos.

La demanda cita específicamente la Sección 7 de la Ley Clayton Antimonopolio de 1914 como causa de la presentación, que busca limitar las adquisiciones que cierran sustancialmente la competencia o crean un monopolio. Los demandantes en el caso argumentan que la compra "le daría a Microsoft una posición inigualable en la industria del juego, dejándola con la mayoría de los juegos imprescindibles y franquicias icónicas".

La presentación intenta además reforzar los motivos de esta preocupación al hacer referencia a sugerencias anteriores de que Microsoft estaba bloqueando el acceso a la Llamada del deber franquicia en otras plataformas, señalando los acuerdos de exclusividad entre Bethesda y Microsoft después de una adquisición de ZeniMax Media por $ 7,5 mil millones, citando estudios que encontraron que el 46% de los usuarios de PlayStation y Nintendo en los Estados Unidos se suscribirían a Xbox Game Pass si la fusión se lleva a cabo. y argumentando que a los jugadores en línea les gusta unirse a sus amigos en la misma plataforma para jugar juntos.

“La tendencia actual hacia la concentración, menos competencia y la tendencia a crear un monopolio en la industria de los videojuegos ya estaba dañando la competencia a un ritmo alarmante antes del anuncio de la adquisición propuesta. […] Si se aprueba la adquisición propuesta por Microsoft de Activision-Blizzard, la industria de los videojuegos podría perder una competencia sustancial y Microsoft podría tener un poder de mercado enormemente desproporcionado, con la capacidad de excluir a los rivales, limitar la producción, reducir las opciones del consumidor, aumentar los precios y obstaculizar aún más competencia.

Una declaración de Microsoft defiende el acuerdo comercial y dice que la fusión "ampliará la competencia y creará más oportunidades para los jugadores y desarrolladores de juegos como [Microsoft busca] llevar más juegos a más personas".

Sentimos la necesidad de señalar que, a pesar de su miríada de argumentos, la demanda se desvía hacia la hipérbole y es en gran medida un espectáculo secundario sin sentido. De todos modos, es al menos una página más en esta saga tan extraña.